Con unos días de perspectiva para ir asimilando las bendiciones recibidas, y aprovechando esta fiesta de María, desde la Delegación de Pastoral Familiar y Defensa de la Vida sentimos la necesidad de compartir con vosotros nuestra alegría y agradecimiento. A todos los que habéis colaborado y participado en las oraciones por la vida y la familia con el Icono de la Virgen de Czestochowa, muchas gracias. Sabemos que todos, además, estamos agradecidos a nuestra Madre por el regalo de su presencia y su compañía.
Compartimos este agradecimiento y alegría con nuestro Obispo don Rafael, que nos propuso acoger la peregrinación, con los movimientos y asociaciones que colaboraron en la recepciones y oraciones en Cádiz, con la Junta de Hermandades y Cofradías y cada una de las Hermandades y Cofradías que asistieron a la Catedral y participaron en el Rosario, con los Focolares, el Camino Neocatecumenal, los Equipos de Nuestra Señora, el Movimiento Familiar Cristiano, la Hospitalidad de Ntra. Sra. de Lourdes y Proyecto David, con Aborto Cero y Red Madre de San Fernando, con Familias Invencibles, la Pastoral Juvenil y la Fraternidad Seglar en el Corazón de Cristo, etc.
Nos unimos a la alegría del matrimonio hispano-polaco que quiso agradecer públicamente a la Virgen la salud de su bebé, y agradecemos a ese otro matrimonio malagueño que se sintió movido a donar una réplica del Icono de la Virgen de Czestochowa para la Catedral de Cádiz. Compartimos nuestra gratitud con las comunidades y parroquias que acogieron al Icono de la Virgen, como las del Santuario de Ntra. Señora del Rosario, la Parroquia de Ntra. Sra. del Rosario y la Comunidad de San Francisco en Cádiz; las parroquias de San Pedro y San Pablo y el Santo Cristo en San Fernando; San Juan Bautista, las Madres Agustinas y San Telmo en Chiclana; la Capilla del Tajo y la Parroquia de Benalup; la Parroquia de San José en Las Colinas de Algeciras; la de la Inmaculada Concepción en La Línea, la Vicaría de Ceuta y la comunidad de Ntra. Sra. de África. Recordamos también a todas las comunidades escolares que recibieron la visita de nuestra Madre, como la del Colegio de “Los Milagros” de las Hijas de la Caridad (Algeciras), o las que se desplazaron a rezar ante el Icono de la Virgen en San Fernando, Chiclana y Benalup. Hubo quienes la esperaron y recibieron tras la reja de su clausura, como las MM. Capuchinas de San Fernando, incluso quienes acogieron su visita imprevista, como las Hermanas de la Cruz de Chiclana y el Santuario de Ntra. Sra. de los Santos. Recordamos también a todos los fieles que colaboraron y participaron en los actos, especialmente a Antonio, el voluntario que hizo de chófer y a su acompañante, y a Juanjo, el técnico que acompañaba al icono y que compartió con nosotros esos días. Tenemos presentes también a tantos que no pudieron acudir por enfermedad o por otras causas, incluyendo a los que no pudieron recibir al Icono de la Virgen en su casa porque el tiempo era limitado. A ellos, gracias por su disponibilidad, con nuestras disculpas. Por supuesto, estamos muy agradecidos a quienes tuvieron la iniciativa de la peregrinación "De Océano a Océano", acogida en España por Mons. Reig Pla y por Alicia Latorre. No podemos olvidar a muchas personas que rezaron anónimamente, algunas desde el silencio de los claustros, para que esta visita diera sus frutos. Y los está dando.
Nos unimos a la alegría del matrimonio hispano-polaco que quiso agradecer públicamente a la Virgen la salud de su bebé, y agradecemos a ese otro matrimonio malagueño que se sintió movido a donar una réplica del Icono de la Virgen de Czestochowa para la Catedral de Cádiz. Compartimos nuestra gratitud con las comunidades y parroquias que acogieron al Icono de la Virgen, como las del Santuario de Ntra. Señora del Rosario, la Parroquia de Ntra. Sra. del Rosario y la Comunidad de San Francisco en Cádiz; las parroquias de San Pedro y San Pablo y el Santo Cristo en San Fernando; San Juan Bautista, las Madres Agustinas y San Telmo en Chiclana; la Capilla del Tajo y la Parroquia de Benalup; la Parroquia de San José en Las Colinas de Algeciras; la de la Inmaculada Concepción en La Línea, la Vicaría de Ceuta y la comunidad de Ntra. Sra. de África. Recordamos también a todas las comunidades escolares que recibieron la visita de nuestra Madre, como la del Colegio de “Los Milagros” de las Hijas de la Caridad (Algeciras), o las que se desplazaron a rezar ante el Icono de la Virgen en San Fernando, Chiclana y Benalup. Hubo quienes la esperaron y recibieron tras la reja de su clausura, como las MM. Capuchinas de San Fernando, incluso quienes acogieron su visita imprevista, como las Hermanas de la Cruz de Chiclana y el Santuario de Ntra. Sra. de los Santos. Recordamos también a todos los fieles que colaboraron y participaron en los actos, especialmente a Antonio, el voluntario que hizo de chófer y a su acompañante, y a Juanjo, el técnico que acompañaba al icono y que compartió con nosotros esos días. Tenemos presentes también a tantos que no pudieron acudir por enfermedad o por otras causas, incluyendo a los que no pudieron recibir al Icono de la Virgen en su casa porque el tiempo era limitado. A ellos, gracias por su disponibilidad, con nuestras disculpas. Por supuesto, estamos muy agradecidos a quienes tuvieron la iniciativa de la peregrinación "De Océano a Océano", acogida en España por Mons. Reig Pla y por Alicia Latorre. No podemos olvidar a muchas personas que rezaron anónimamente, algunas desde el silencio de los claustros, para que esta visita diera sus frutos. Y los está dando.
En estos días, hemos escuchado testimonios de personas que recibieron el consuelo de encontrarse con nuestra Madre, y de quienes se sintieron conmovidos por las oraciones por la vida y la familia. Nosotros hemos visto que es nuestra Madre la que nos guía en defensa de la vida y la familia en este tiempo difícil. Ahora nos proponemos perseverar en la oración por la familia y la vida, desde la concepción hasta la muerte natural. En Cádiz, ya hace un año que venimos orando en la Parroquia de Ntra. Sra. del Rosario todos los últimos vienes de mes, y ahora lo seguiremos haciendo, con un Rosario o con un Via Crucis en tiempo de Cuaresma. Os animamos también a vosotros a uniros a esta oración y a incorporar la oración por la vida y la familia a vuestros actos.
Unidos en la oración común por el Papa Benedicto y por toda la Iglesia, recibid un fuerte abrazo en el Señor y María Inmaculada.
Oscar González Esparragosa
Delegado Episcopal para la Familia y la Defensa de la Vida
