Siguiendo la estela de las
escuelas de evangelizadores y de discipulado, la Delegación Episcopal de
Familia y Vida ha celebrado por tercer año consecutivo una tanda de Ejercicios
Espirituales para matrimonios y familias.
Han sido dirigidos por el P. Juan
Carlos García Jarama según el esquema y estilo ignaciano caracterizado por el
silencio y por los amplios espacios para el diálogo con el Señor. Las pláticas
se han centrado en la santidad como principio y fundamento universal para todas
las personas, el significado del pecado y sus consecuencias, el sabernos hijos
de Dios y templos de la Santísima Trinidad, entre otros.
Lo más valorado ha sido el
silencio como herramienta que facilita el encuentro y diálogo con Jesucristo,
los momentos de oración, la exposición del Santísimo, la Eucaristía, la
confesión, el rezo del Santo Rosario, así como la claridad
didáctica de las pláticas. Se terminó con una puesta en común donde cada uno
expuso sus impresiones sobre los Ejercicios y donde se manifestó el deseo mantener esta llama viva con la oración diaria, la Eucaristía
como centro de toda vida cristiana, la confesión frecuente y, como novedad, la
propuesta de “continuar” estos Ejercicios con un retiro mensual.
Animamos a todos a asistir a los
próximos Ejercicios Espirituales
que la Diócesis tiene programados en los meses
de marzo y abril, para como dice Santa Teresa dedicar un tiempo en exclusiva a "tratar
de amistad, estando muchas veces tratando a solas con quien sabemos nos ama"
y con palabras del santo cura de Ars: “es la elevación de nuestro corazón a
Dios, una dulce conversación entre la criatura y su Criador”.