El
pasado domingo día 5, celebró el Movimiento Familiar Cristiano la Asamblea de inicio de curso en la
parroquia de la Divina Pastora de San Fernando, con asistencia de miembros de
las distintas localidades de la diócesis, donde está instaurado dicho
Movimiento.
Se
iniciaron las actividades con el rezo de laudes, y a continuación comenzó la
Asamblea, en la que los presidentes diocesanos
dieron cuenta de los acuerdos y objetivos para el presente curso, aprobados en
la Asamblea Nacional celebrada en Guadarrama (Madrid), así como de la conferencia impartida por el Obispo de
Guadix-Baza en dicha Asamblea.
Se
presentaron las actividades a desarrollar, para poder realizar los objetivos aprobados; y tras
un debate se incorporaron algunas aportaciones de los asistentes, siendo
aprobadas por la asamblea.
También
informaron los responsables de impartir los Encuentros Conyugales que tendrán
lugar los días 15 y 16 de noviembre y posteriormente,
el 31 de marzo y 1 de abril. Se presentó
un libro para reuniones de grupos de Viudas, elaborado en la diócesis de
Zaragoza. Tras la aprobación de cuentas y presupuesto,
finalizó la Asamblea, pasando a la iglesia parroquial a celebrar la Eucaristía
que fue presidida por el Consiliario Diocesano P. Balbino Reguera.
Finalizó
la jornada de trabajo, oración y convivencia con una comida compartida en el
salón parroquial, tras la que marcharon los asistentes a sus lugares de origen
a iniciar su trabajo en los Equipos del Movimiento Familiar Cristiano,
fortaleciendo la pastoral familiar en la diócesis.
El Movimiento Familiar Cristiano es una asociación pública de la Iglesia Católica que aglutina a grupos de familias que, junto con los sacerdotes y preferentemente en las parroquias descubren que la fe es fruto de la Gracia de Jesucristo. Familias convencidas de que el Evangelio es la única solución a la problemática de nuestra sociedad. Familias que constituyen comunidad de fe y de vida; que se reúnen periódicamente (normalmente cada 15 días) para rezar, para ayudarse mutuamente en la formación, y para compartir su camino espiritual y su acción evangelizadora.
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