lunes, 7 de abril de 2014

TESTIMONIO DE LOS EJERCICIOS ESPIRITUALES - MARÍA FERNANDA ÁLCANTARA

¡En el corazón de Jesús!

Señor, Tú nunca nos defraudas. Tu amor es inconmensurable, sí, que no se puede medir, que nos sobrepasa. Que con nuestros criterios y conocimientos no podemos abarcarlo. Todo esto y una gran felicidad es lo que sentí en los ejercicios espirituales.

Nos hace mucha falta ponernos a tus pies. Estar en ti, reposar y pensar corazón a corazón, con tus parámetros.

Me quedé con ganas de más, me supo a poco porque, una vez que se alcanza el cielo, ¿para qué bajar a la tierra? Eres dulce, amable, atento, Señor, y con ternura infinita nos haces ver todo lo que hay que restaurar en nuestra vida.

¡Qué gozo de dos días pasados contigo! Íbamos a Ti a través de tu presencia eucarística, de la naturaleza, de las palabras del padre Carlos, los silencios llenos de Ti...

Gracias, Señor, gracias. Fui pobre y me vine rica. Que nada ni nadie me arrebate tu amor que es mi mayor riqueza.

Un alma en Dios escondida
¿qué tiene que desear,
sino amar y más amar,
y en amor toda escondida
tornarte de nuevo a amar?

Teresa de Ávila (Coloquio amoroso)


Chipiona. Monasterio de Regla. María Fernanda Alcántara