Os voy a contar mi testimonio de estos ejercicios, algunas experiencias no se pueden expresar con palabras.En primer lugar tuvimos un recibimiento por Antonio, Rosa y el padre Carlos de lo mas cariñoso.
Un mismo sentir entre todos los que ibamos y muchas ganas de tener un encuentro fuerte con el Señor. La convivencia que hemos tenido entre todos los que ibamos era de un silencio de voz pero no del alma y se respiraba una paz indescriptible,esta es una de las experiencias que no se pueden explicar con palabras. Yo personalmente iba con muchas ganas de hablar con Dios pero sin prisas,preguntarle ciertas cosas que pertuban mi fe,mi deseo era escucharle y hablarle y así ha sido pero eso queda en un segundo plano porque mi experiencia fuerte en estos ejercicios ha sido SENTIR EL ABRAZO DE DIOS.
Es verdad lo que os cuento,no son palabras bonitas que quedan muy bien ponerlas es que lo he sentido de verdad. He notado su amor incondicional porque no me pedía nada solo darme su amor. Me emociono al recordarlo.
Al empezar los ejercicios el padre Carlos nos dijo que el Señor tenia sed de mi y yo lo he experimentado. Ha sido una experiencia nueva que ha hecho enamorarme mas del Señor, espero dejarme amar fuertemente por EL. Os mando un fuerte abrazo a todos los que hemos compartido estos ejercicios y uno muy ,muy grande al padre Carlos por su entrega total que ha tenido con todos nosotros.
África Torres López
